La española Carolina Marín de 27 años, ex número uno del mundo, fue una imponente en la final de bádminton Open Tailandia, una actuación inteligente y un nivel inigualable de agresión y agilidad.
Gritó de alegría cuando ganó el punto de partido en el segundo set después de aplastar a su oponente de 26 años de Taiwán 21-9, 21-16 en 42 minutos.
«Quería mostrarle desde el principio que quería ganar», dijo Marín.
Tai admitió que no pudo mantener el ritmo y que su condición no estaba a la altura.
«Carolina siempre es rápida y agresiva. Ese es su estilo de juego. Hoy me presionó mucho», dijo Tai.
Marín, la primera jugadora no asiática en ganar un oro olímpico en bádminton, se ha enfrentado a una ardua batalla para recuperarse de una lesión de rodilla en enero de 2019 a tiempo para defender su corona en Tokio.
